Dentro de la ingente aparición de material discográfico procreado durante el confinamiento y que ha ido viendo la luz en época estival, la publicación del EP 'madhouse' del músico británico Matt Maltese es todo un soplo de aire fresco. Con un sonido elegante y emocional que casa apuntes de pop barroco con un tacto urbanita más propio de lo contemporáneo - convenientemente barnizado con la ayuda inestimable del prolífico Jonathan Rado a los mandos y colaboraciones lustrosas como las de Brian D' Addario (The Lemon Twigs) o Rose Elinor Dougal - el londinense presenta una más que estimable colección de canciones sobre el anhelo del amor, que funcionan como apéndice de sus dos primeros discos - 'Bad Contestant' (2018) y 'Krystal' (2019) pero también como reflejo del vaivén emocional cincelado en contextos tan enrarecidos como el que nos viene enmarcando desde este 2020.

En las canciones de ‘madhouse’ cómo por ejemplo ‘Little Person’ (que abre el disco) persiste una transparencia comunicativa y emocional que tiene una sutil pincelada de veneno. ¿Se trata de una fórmula para hacer más adictivas las canciones pop sobre el amor y sus circunstancias?
Creo que la transparencia emocional a menudo hace mejores a las canciones, pero yo no diría que siempre. Sin embargo, creo que la transparencia siempre es clave … incluso la transparencia sobre no ser transparente.
Me hace mucha gracia la frase “Come rain, come climate change” de ‘Queen Bee’. En tu música hay mucho de pop romántico pero también bastante humor. ¿No es así?
Siempre me ha gustado usar el humor, ya que es la forma en que proceso muchas cosas. Y siempre he estado dolorosamente enamorado del amor.



Sigues manteniendo una estupenda relación artística con Jonathan Rado. ¿Él es el Rick Rubin del pop post-indie?
(Ríe), sí, quiero decir, realmente no sé con quién lo compararía, ¡pero definitivamente es el genio de la botella!
La guitarra de Brian D´Addario suena elegante y contenida en ‘Queen Bee’. ¿Cómo surgió esa colaboración?
Jonathan Rado le trajo unos días al estudio cuando estábamos haciendo música, hace unos años. Me quedé realmente asombrado con su nivel. A los dos también nos encantan las canciones de amor, lo que ayudó … y él me estuvo enseñando todo el tiempo.
Dada tu juventud y unos parámetros estéticos similares te encuadran junto a músicos como Cuco o Boy Pablo. ¿Te sientes en su misma onda o quieres que se te considere como un artista singular y que va por libre?
Realmente no he escuchado mucho de su música antes, ¡pero no me importan las comparaciones! Creo que siempre ayuda a digerir algo cuando se compara con otra cosa; yo mismo lo hago mucho..
Resulta paradójico que, a pesar de que ‘madhouse’ es un disco trabajado en casa, hayan participado diversos músicos de gran caché. ¿Es lo bueno de la creatividad 3.0?
Creo que sí, definitivamente hubo una mezcla con este EP … y supone una suerte el hecho de poder llamar a otros músicos increíbles pero a la vez tener la oportunidad de trabajar en la música desde mi habitación.
Hace un par de años cantabas en ‘As the world caves in’: “The Papers say it's doomsdayThe button has been pressed”. ¿Te asusta que esa meta-ficción haya cobrado relativo realismo?
Sí, definitivamente, todavía era muy real en ese entonces pero, por supuesto, la sensación de Armageddon se ha duplicado desde entonces. Pero espero que sea un consuelo y no empeore las cosas.
El sonido de ‘Hi’ (que cuenta con la colaboración de Rose Elinor Dougall y Edd Holloway) tiene trazos de pop hipnagógico, en la onda de lo que hace gente como Frank Maston o el Jacco Gardner más experimental. ¿Te gusta ese sonido casi hipnótico para transmitir determinado tipo de emociones?
Creo que con esta canción así es como salió realmente … originalmente era una canción de piano y luego gradualmente se convirtió en una especie de vals lento cuando se agregaron las baterías … y sentí que se adaptaba a la emoción … a ese tipo de enamoramiento gradual...
‘madhouse’ es una canción elegante que invita al baile doméstico con sus sintetizadores y sus coros robóticos. ¿Cómo ha sido la relación con tu propia casa durante el confinamiento? ¿Eres de los que sientes curiosidad por las casas ajenas en las cada vez más frecuentes videollamadas o en canales de YouTube estilo Nowness?
Mi relación con mi casa estuvo bastante bien durante el confinamiento. Tengo la suerte de poder hacer cosas, pero por supuesto todavía era extraño, incierto y difícil a veces. En cierta manera es como tu cuentas: supongo que tengo más curiosidad por saber cómo podría sentir en ciertos tipos de casas y lugares, y eso fue en torno a lo que evolucionó la canción.



¿Esa reclusión forzada ha hecho que te replantees ciertas cosas de tu propia vida como por ejemplo querer encontrar el amor verdadero a toda costa?
¡Bueno! No estoy seguro con eso de "a toda costa" … Creo que mi actitud hacia la noción de "encontrar el amor verdadero" es definitivamente mucho más relajada de lo que solía ser. Obviamente, nunca puedes subestimar lo relevante que es tener a las personas importantes y a las que amas en tu vida, pero creo que realmente no puedes forzar mucho sobre eso ... Tiene mucho que ver con el tiempo y eso está fuera de nuestro control … y creo que pasar tiempo con amigos y familiares puede ser igualmente esencial.
La canción de corte más clásico es la que cierra el disco, ‘Sad dream’. Suena a un homenaje a The Left Banke pasado por el filtro del sunshine pop. ¿Te consideras un nostálgico del pop o tus inquietudes son tanto del pasado como del presente?
¡Gracias! Yo diría que me gustan mucho las cosas nuevas y las viejas … obviamente hay muchas más cosas del pasado en las que poder bucear, pero definitivamente no parto desde el prisma de "solo las cosas viejas eran buenas". Ese campamento es aburrido.