Desde que comenzó con su vena altruista para descubrir las flores exóticas del flamenco y la movida madrileña y viguesa, Mario Pacheco siempre estuvo a la sombra de figuras musicales. Más allá de su instinto para captar el duende, también hizo translucir su vocación como fotógrafo. Sin estas dos vertientes, no se entendería la evolución de la música española en estas cuatro últimas décadas, además de ser una figura clave en la documentación artística y social del pueblo gitano y los barrios de Madrid y Sevilla, a lo largo de los años 70, 80 y 90.
Gracias a su espíritu indagador, Ketama, Golpes Bajos, Pata Negra, Martirio o Ray Heredia vivieron su época gloriosa, a través de Nuevos Medios: el sello que él y Cucha, su mujer, idearon con la intención de que germinaran flores exóticas de la música nacional, pero también se pudieran distribuir en España los discos de grupos clave como New Order o The Smiths, e incluso alguna delicatessen como The Go-Betweens.
Protagonista de una vida de vidas, ahora es el momento de sacar a Mario de la sala de revelado y fotografiarlo en toda su naturaleza; para lo cual, el director Simó Mateu y su equipo se han lanzado a la aventura de realizar un trabajo que se verá estrenado a principios de 2020, y que ya ha abierto las puertas de un crowfunding con el objetivo recaudar 10.000 euros para finalizar la grabación y revelar los más de 20.000 negativos de fotografías inéditas.
