El Palacio de Linares: Agárrame esos fantasmas

El Palacio de Linares.

En su libro 'El secreto de Raimunda: La Marquesa de Linares', la historiadora Carmen Maceiras pretendía demostrar como reales los hechos que supuestamente acaecieron durante finales del S.XIX en la actual sede de la Casa América de Madrid y que giraban en torno a una historia de incesto, bula papal pasada por alto y un supuesto filicidio consumado. Una truculenta historia surtida con clichés decimonónicos, que devino en Expediente X periodístico con la ayuda de psicofonías varias, canciones fantasmagóricas y guardias de seguridad epatados y con ganas de rescindir su contrato de trabajo de forma unilateral. El Palacio de Linares es el lugar, la casa tomada por los fantasmas y convertida en la actualidad en institución social y cultural, y que su vez bautiza a una banda de pop curtida por una trayectoria plagada de idas y venidas que nada tienen que envidiar a las manifestaciones espectrales de la niña Raimunda. El Palacio de Linares (el grupo) fue fundado allá por 2011 con Gonzalo Marcos, Mariví Hernández Lara, Ángel Román y Elena Cascón en la alineación titular de los créditos del 7" 'Himalaya' (Elefant Records, 2012). Posteriormente llegaron 'La Casa Es Negra' (Discos de Paseo, 2013) y 'La Espalda de un perro' (Sweet Grooves Records, 2014), discos facturados en una época determinada por las altas y bajas en la formación (llegó a incorporarse Clara Collantes como vocalista, ya que Ángel Román y Elena Cascón se marcharon), y una disolución que pareció, en su momento, definitiva.

concierto-de-el-palacio-de-linares-cosmic-birds-en-valladolid (2)Sin embargo, y casi contra todo pronóstico, Gonzalo Marcos, batería y fundador de la banda, retomó de nuevo el proyecto con la ayuda de Alex y Raúl, componentes de la banda pamplonesa Los Nuevos Hobbiesy contando con la supervisión sonora de Yon Vidaur (Ama), acaban de publicar el LP 'Ataque de amor' (Pretty Olivia Records, 2016). Algo menos de media hora de pop estimulante y certero que pone punto y seguido a un viaje realmente peculiar plagado de cambios de domicilio discográfico. "Habrá que reconocer que sí que ha sido algo peculiar, aunque tiene cierto sentido que lo sea. Por un lado, ha sido mi grupo de toda la vida y han ido entrando y saliendo amigos según circunstancias vitales de cada uno y afinidad en lo musical y personal. Y por otro, que también afecta a lo anterior, somos un grupo deficitario (en lo nuestro y en lo que afecta a lo que nos rodea) y esto nos obliga a ir cambiando de compañía discográfica. Respecto a las disoluciones… ¡la última parecía la definitiva! Siempre lo parecen, ¿verdad?", nos cuenta el propio Gonzalo Marcos, quien emperrado en seguir sacando su amor por las canciones a flote no tiene reparos en seguir manteniendo el nombre de la banda pese a las circunstancias: "Me daba un poco de pereza tener que empezar con un nuevo nombre, con lo que ello supone a nivel de promoción en redes sociales y demás. Al final tenemos muy poquitos aficionados a nuestra música, y no me apetecía arriesgarme a perderlos por un cambio de nombre (que hubiera sucedido de cualquier modo si nos hubiéramos puesto a hacer, qué sé yo, música electrónica). Y oye, que el nombre de un grupo da un poco igual y, aunque suene a tópico, lo que importan son las canciones".

Portada de 'Ataque de Amor'
Portada de 'Ataque de Amor'

¿Y porque un disco largo?. Igual hubiera resultado mejor probarse con otro 7" y ver como respondía la gente ante esta reinvención, aunque Gonzalo no lo ve así: "No, no, esto sí que lo tenía claro. Mi formato preferido de lejos es el LP y ya llevábamos tres 7" y un 10". Una duración de disco de entre 20 y 40 minutos es perfecta. Eso sí, de nuevo otro cambio de casa discográfica, publican con Pretty Olivia Records, aunque siendo Gonzalo el capo de su propio sello, el coqueto Bobo Integral, podría haber optado por jugar en campo propio. "Bobo Integral es mi sello y no me apetece mezclarlo más de la cuenta con mi grupo. Tiene una cosa muy buena trabajar con otros y es que puedes tener su feedback de cómo van saliendo las cosas. Cuando está uno metido en la vorágine de grabar un disco es muy complicado tomar cierta distancia y saber si estás haciendo algo medio coherente", argumenta. "Por otro lado, la intención primera era continuar con Sweet Grooves Records, ellos editaron nuestro 10" y son enormes personas. No obstante, no encajaron las cosas como necesitábamos ambas partes en esos momentos y la opción de Pretty Olivia era inmejorable.

Yon Vidaur.
Yon Vidaur.

El sonido final de las canciones lo han trabajado con Yon Vidaur y realmente se nota, especialmente en temas como 'La melena' o 'Si fueras mi novia', que recuerdan a las canciones de 'Nada dos veces' (Jabalina, 2015), el fantástico último disco de Ama. "La elección de grabar con Yon fue completamente instintiva. Me gustó mucho el último disco de Ama (a los que no había prestado atención hasta entonces), me gustó mucho el disco de Bassmatti & Vidaur, e intuí que Yon tenía una sensibilidad especial. No tenía grandes motivos para pensarlo, dado que no sabía qué parte de culpa tenía él en que esos discos estuvieran tan bien pero hay que fiarse. Tras cruzar varios mails con él sí que noté que iba a poner el empeño adecuado en sacar esto adelante". Intuición que parece haber sido muy fiable: "Bueno, acerté. Sin Yon el disco habría sido infinitamente peor. De hecho, para mí ha sido tan importante en el disco como el resto de los miembros del Palacio".

[pull_quote_left]Sin Yon (Vidaur) el disco habría sido infinitamente peor. De hecho, para mí ha sido tan importante en el disco como el resto de los miembros del grupo[/pull_quote_left]

'Ataque de amor' es un brillante recorrido por el indie-pop de pedigrí en todas sus vertientes, ora más guitarrero, 'El puzzle' ora más delicado, 'Si fueras mi novia'. "Lo de hacer un disco variado es puñetero, sigue siendo un reto para nosotros hacer un disco más cerradito en sonido, de los que pasas de una canción a otra casi sin darte cuenta. No obstante, supongo que sale así porque todos escuchamos música muy diversa. Sobre todo Raúl, que es el compositor principal y el talento puro del grupo", comenta Gonzalo en alusión a su nuevo compañero de aventuras. El Palacio de Linares parece una banda ajena a cierta corriente que ahora subyace en la escena musical y que tiende a denostar el indie y restarle el ápice de importancia que haya podido tener en la música de las últimas generaciones. "No puedo contestarte con propiedad, dado que no sé muy bien quién o qué es la escena musical. De hecho todo esto lo veo muy relativo: la música pop para mí es importantísima, pero entiendo que para otros sea una chorrada supina. Tampoco comparto la necesidad de aceptación social que reclaman muchos músicos, digamos, amateur para sí, ni sus quejas por no cobrar lo suficiente o por que no les llaman para los grandes festivales. Lo veo más sencillo: lo que haces no le interesa a tanta gente, sin más".

Facturan en el disco homenajes evidentes, en especial el que dedican a The Feelies  en 'Senteemienties', y otros más próximos, como cuando cantan aquello de "el mundo está lleno de maldad" al comienzo de 'Los Peces' y que remite a la canción de Los Caramelos de Charlie Mysterio ("ya lo avisó Charlie en 2002"). "Con esto me intento cortar un poco, que es fácil cerrarte en tu burbuja e impedir que entren en las canciones desde fuera. Pero sí, vaya, soy muy fan de todo esto, como cuando TV Personalities le cantaban a Syd Barrett, los Replacements a Alex Chilton, los Dexy’s a Geno Washington...". A vueltas con el pop y sus circunstancias, especialmente las mitómanas y fetichistas, 'Ataque de amor' es un disco que parece muy pensado para su edición en vinilo. "Esto era sí o sí, o el disco salía en vinilo o no salía. No soy demasiado especial con la parte sónica, pero sí que le tengo especial apego al objeto. Luego ya sí que intentamos cuadrar dos caras medianamente compensadas"

Aunque la melodía se suele llevar la palma, en el buen pop la letra también manda. Aquí se cantan cosas como "Si fueras mi novia me encargaría de buscarte los torrents", a vueltas con lo sencillo, directo y contemporáneo. "Las letras las hago en cinco minutos, generalmente tras una idea previa que me apunto en el móvil o donde pueda. Desde ahí no se tocan hasta, si acaso, el mismo día de la grabación, donde igual sí que retoco una u otra palabra. Es muy divertido imaginarse cómo se debe pelear Raúl al montar las canciones sobre unas letras que no encajan con casi nada. La primera persona en singular que sobrevuela los diez cortes del disco muestran pinceladas de un tipo de personaje perdido y despeinado a lo Jonathan Richman, que oscila entre el desamor, la perplejidad, y demuestra algo de cabreo, pero siempre con el humor oxigenándolo todo. "Le tengo bastante respeto a las letras muy serias y enfurruñadas e intento ser muy ligero en lo que cuento para, primero, dejar claro que esto es sólo música pop, y después sí, dejar pequeñas rendijas en las que se cuele algo ligeramente más trascendente. El equilibro entre profundidad y liviandad es el secreto de una buena letra, de esto no me cabe duda".

Como bien dejó escrito Federico Garcia Lorca, "La vida es amable, tiene pocos días y tan solo ahora la hemos de gozar", y los miembros de El Palacio de Linares andan disfrutando el momento de las canciones de 'Ataque de amor' y viendo hasta adonde les pueden llevar, y aún a sabiendas de su curioso transitar discográfico, parece que esta sábana que lleva el fantasma aún tiene tela que cortar: "Nunca se sabe, pero ya está Raúl haciendo canciones nuevas en base a las letras que le paso. Y molan mucho, así que por qué no".