El laboratorio sideral de Saluti Da Saturno

Saluti Da Saturno.

El Labotron es un laboratorio musical situado en la ciudad de Bologna repleto de instrumentos de origen casi marciano como el Optigan, mellotron o curiosos modelos del órgano hammond. Una colección de artefactos, samples y teclados que sirve de refugio creativo para el inimitable Mirco Mariani. Este bardo con aspecto de geniecillo despistado es el factótum de uno de los grupos más interesantes de la música italiana actual y por ende, de la música pop más excelsa.

Saluti Da Saturno es el nombre del proyecto de este músico italiano que durante varios años ha colaborado tocando todo tipo de instrumentos en varios discos y giras de uno de los totems de la penúltima música popular italiana, Vinicio Capossela. En 2010, Mirco decidió dar rienda suelta a su expansivo talento y, rodeándose de colaboradores de distinto calado, publicó el primer disco de Saluti Da Saturno, un bonito tratado de canción de autor mediterránea llamado 'Parlare Con Anna' y que cuenta a modo de máximo reclamo con la presencia del propio Capossela a las voces en varios cortes del disco, como en la preciosa 'Casa' o la melancólica 'Luce'.

A principios de 2012 y embriagado por músicas de distinto pelaje pero siempre dentro de un sentido de la uniformidad encomiable, Mariani publica el fantástico 'Valdazze' donde se dan cita la Italia poética y socarrona de un Paolo Conte rejuvenecido y el trantran mágico de los teatrillos de principios del siglo XX. Canciones lúdico-festivas como 'Hotel Miramare', instrumentales fantasmagóricos como 'Optigan Nella Nebia' (que posteriormente utilizaran a modo de intro en su último disco) o la fantabulosa 'Afa', una canción que invita al baile suave y que deja con ganas de más.

[pull_quote_left]Este bardo con aspecto de geniecillo despistado es el factótum de uno de los grupos más interesantes de la música italiana actual y por ende, de la música pop más excelsa[/pull_quote_left]

El tercer disco, 'Dancing Polonia' (2013), viene precedido por el single 'Un Giorno Nuovo' que ya adelanta las virtudes de lo que ofrecerá el LP. Un larga duración que cuenta con colaboraciones tan lustrosas como las de Arto Lindsay (un brasileiro en la corte de la vanguardia neoyorkina) o Paolo Benvegnù y donde el verdadero protagonismo reside en la variopinta colección de instrumentos "labotrónicos" (Ondiolina, Ondas martenot, Glassarmonica, Cristal Baschet, Mellotron, Intonarumore) que están siempre al servicio de la canción.

Mariani quiso también rendir su particular y poliédrico homenaje a la música que ha conformado su personalísimo bagaje y se sacó de la manga durante este 2014 el disco de versiones 'Shaloma Locomotiva' donde lleva a su Saturno particular clásicos de Sergio Endrigo, Gino Paoli o Consuelo Velasquez.

Con un trayectoria ascendente en la que Mariani ha ido soltando lastre de cierto manierismo autoral para encontrarse frente a un pop universal y libérrimo parece que en breve volverá a cocinar en su laboratorio mágico una nueva colección de canciones que quizá propulsen su música sideral mas allá de las fronteras de la Vecchia Italia.